Agro Sur 35(1): 12-13 2007
ORGANIZACIÓN DE LA ACTIVIDAD APÍCOLA
DINÁMICAS ASOCIATIVAS DE APICULTORES DEL CENTRO SUR DE CHILE
ASSOCIATIVE DYNAMICS OF BEEKEEPERS FROM SOUTHERN CHILE
Sofía Druker Ibáñez
Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Austral de Chile.
Palabras clave: Asociatividad, apicultores.
La investigación que aquí se presenta ha sido realizada en dos etapas:
1) Primera etapa
Desarrollada por la autora durante dos años, con el propósito de construir un perfil general de pequeños y medianos apicultores de las regiones VIII, IX y X, enfatizando los procesos organizativos y las dinámicas asociativas que estos ponen en juego a la hora de constituir y mantener organizaciones de carácter productivo.
La metodología utilizada fue de carácter cualitativo y apuntó a recoger, cotejar y analizar las percepciones de los apicultores participantes y las observaciones en terreno realizadas por la investigadora.
Las conclusiones de esta etapa permiten afirmar que tanto la actividad apícola como los procesos organizativos que los apicultores llevan a cabo en su calidad de productores, involucran construcciones de sentido que desbordan los fines estrictamente productivos con los que se las asocia. En efecto, en lo tocante a la actividad apícola en si misma, los productores generan vinculaciones afectivas con respecto al “recurso abeja” que están mediatizadas por valoraciones simbólicas de la actividad, lo cual respondería a los altos niveles de autonomía relativa que caracterizan y diferencian el trabajo apícola de otros trabajos agrícolas. Tal como los apicultores individualmente significan el recurso abeja, los apicultores agrupados significan el concepto de organización productiva, pues además de los aspectos tocantes a la producción y venta de productos, ellos vivencian las organizaciones a las que pertenecen como espacio de interacción social y construcción de vínculos interpersonales; esto es, aún cuando el aspecto productivo de dichas organizaciones es considerado como un factor de suma relevancia, los apicultores en su mayoría valoran principalmente factores no directamente productivos, tales como el acceso a personas y espacios nuevos, a nuevas experiencias educativas o simplemente a las posibilidades que ofrecen las organizaciones de crear vínculos con otros apicultores.
2) Segunda etapa
En esta segunda etapa, y a partir de las conclusiones de la primera, se estructuró un trabajo de investigación-acción participativo que tomó la forma de talleres, realizados en las regiones VIII, IX y X, con el objetivo de generar un modelo organizacional propio y en los que participaron apicultores representantes de organizaciones con las que se había trabajado en la etapa anterior.
El sistema de trabajo colaborativo se basó en la metodología Interaccional Integrativa (MII), lo que permitió acoger y sistematizar las experiencias, conocimientos e intereses de los apicultores participantes para resolver las problemáticas involucradas en la consecución del objetivo.
El producto de esta co-construcción entre investigadora y apicultores, es un modelo organizacional en el cual se sintetizan los análisis, propuestas y proyecciones del colectivo, configurando un referente inédito en tanto implica una propuesta de intervención diseñada a partir del proceso de reflexión e intercambio de experiencias de los sujetos a quienes la intervención va dirigida.