Bosque, Vol. 24 N° 1, 2003, pp. 71-85 ARTICULOS
Caracterización florístico-estructural de remanentes de bosques de Nothofagus alpina, Fagaceae, del área costera de Chile central Floristic and vegetative structure of the Nothofagus alpina (Fagaceae) remanent forest of the Coastal Range, central Chile
JOSE SAN MARTIN A. Instituto de Biología Vegetal y Biotecnología, Universidad de Talca, Casilla 747, Talca. SummaryWe studied the floristic
and vegetative structure of the Nothofagus alpina (Fagaceae)
“Rauli” forest stand in Copiulemu (latitude 36º 03’ S; longitude 72º 38’
W), at the northern extremity of Region VIII in the Coastal Range, central
Chile. Key words: Nothofagus alpina, floristic richness, Maulino forest, Valdivian rainforest, secondary forest. ResumenSe describe la composición
florística y estructura de rodales de bosques de Nothofagus alpina,
Fagaceae (Raulí) para el sector costero de Copiulemu (36º 03’ LS 72º 38’
LO), extremo norte de la VIII Región de Chile Central. La riqueza florística
es de 82 especies vasculares con el 87,7% de origen nativo y representación
de Pteridophyta (4 especies), Gymnospermae (2 especies) y Angiospermae
con las clases Dicotyledonae (62 especies) y Monocotyledonae (14 especies).
En la organización vertical dominan los árboles y hierbas con 25 especies
cada uno. La diversidad del sitio y el estado postimpacto antrópico determinan
en los rodales una distribución espacial desigual de las especies, calculándose
en sólo seis los censos florísticos necesarios para captar su estructura.
De acuerdo a la frecuencia y valores de importancia las especies que definen
la composición de los rodales son: N. alpina, N.
glauca, N. obliqua, Gevuina avellana,
Aextoxicon punctatum, Aristotelia chilensis,
Jovellana punctata, Blechnum hastatum,
Adiantum chilensis y Lapageria rosea.
El análisis de la textura del conjunto florístico indica la presencia
de elementos esclerófilos (17 especies), mésicas e higrófilas del Bosque
Maulino (41 especies) de Chile Central y Bosque Valdiviano del sur del
país (24 especies). Entre las especies con problemas de conservación se
incluyen Gomortega keule, Nothofagus glauca
y Citronella mucronata y de interés biogeográfico las
familias Aextoxicaceae y Gomortegaceae monotípicas y monoespecíficas propias
del bosque templado de Chile. Para el área de estudio y con distribución
sólo en la Cordillera de la Costa se encuentran Gomortega keule,
Pernettya insana, Herreria stellata
y Sphacele chamaedryoides. Palabras claves: Nothofagus alpina, riqueza florística, Bosque Maulino, Bosque Valdiviano, bosque secundario.
INTRODUCCIONNothofagus alpina (P. et E) Oerst., Raulí, Fagaceae, es un árbol caducifolio y endémico de los bosques templados subantárticos con distribución en territorio argentino y chileno en el extremo suroccidental de Sudamérica. Por el lado de Argentina, entre los 39º 24’ y 40º 10’ LS y siguiendo la ladera oriental de la Cordillera de los Andes, las formaciones de “Raulí” presentan distribución continua (Veblen et al. 1996), mientras que, por el lado chileno, es disjunta con una mayor cobertura latitudinal modelada por el relieve geográfico del país. Algunas comunidades se encuentran en la ladera occidental del cordón cordillerano andino desde el estero Los Queñes (35º 13’ LS), VII Región provincia de Curicó, por el norte, al Lago Maihue (40º 22’ LS), provincia de Valdivia, X Región, por el sur (Donoso 1978, Ormazábal y Benoit 1986). Luego, otras continúan por la Cordillera de la Costa desde el sector de Copiulemu (36º 03’ LS), VIII Región (San Martín y Doll 1999), a un sector de Purranque (41º 15’ LS) provincia de Osorno, X Región (Martínez 1993). Finalmente, ejemplares aislados ocupan la depresión intermedia desde Lanco (39º 30’ LS) al norte del río Llico (41º 08’ LS) (Donoso 1978, Ormazábal y Benoit 1986). La distribución más continua de la especie se observa en el área precordillerana andina en altitudes de 300 a 1.300 m (Pollmann 2001), mientras que por la cordillera costera, entre los 100 a los 600 ms.n.m., lo hace en rodales discontinuados (Rodríguez et al. 1983). Como consecuencia del modelo distribucional en Chile, Raulí ocupa diferentes zonas ecológicas con definición de comunidades y participación en otras, pudiendo incluso hibridar con Nothofagus obliqua (Donoso et al. 1990). Entre las formaciones vegetales se encuentran el tipo forestal Roble- Raulí-Coigüe (Donoso 1981) y tres asociaciones florísticas: Dasyphyllo-Nothofagetum alpinae, Bosque de Raulí y Trevo, Nothofagetum dombeyialpinae, Bosque de Raulí y Coigüe, y Nothofagetum procerae, Bosque de Raulí (Pollmann 2001). La presencia de la especie en áreas del Sistema Nacional de Areas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE) incluye 9 unidades de la IX Región, de las cuales cuatro son Reservas Forestales y cinco Parques Nacionales. Ello implica que la superficie protegida corresponde a la zona distribucional geográfica media de la especie, encontrándose sólo una para la Cordillera de la Costa y las ocho restantes en el sector preandino (Ormazábal y Benoit 1986). Luego, la mayor parte del área distribucional de la especie está excluida de las unidades protegidas del SNASPE. En el ambiente natural N. alpina se inserta en comunidades con una variabilidad florística incompletamente informada, en especial de aquéllas alejadas de los centros de mayor representación de los bosques, como es el caso de las posiciones marginales de su distribución. Esta desigualdad en la información se justifica cuando una especie incluye sólo algunos individuos, pero no cuando es posible encontrar aún remanentes con carácter de bosque. Esta última situación es la encontrada en el sector de Copiulemu. El objetivo de este es trabajo es dar cuenta de la organización florístico-estructural de rodales de Bosques de “Raulí” situados al norte del río Itata de la cordillera costera y en la región ecológica del Bosque Caducifolio Maulino Costero de Chile Central (Gajardo 1993). MATERIAL Y METODOSEl área de trabajo lo constituye el Predio Mirador 3, ubicado en la ladera occidental de la Cordillera de la Costa del sector de Copiulemu y extremo norte de la VIII Región (36º 03’ LS 72º 28’ LO) (San Martín y Doll 1999), aproximadamente a 50 km más al norte del río Itata y 5 km al sur de la Reserva Nacional Los Queules, VII Región (figura 1) (Carta Terrestre IGM 1986).
La geomorfología del sitio es irregular, con elevaciones montañosas y alturas inferiores a los 800 ms.n.m., laderas, quebradas estrechas y profundas a causa de la ausencia de relleno fluvial en el cuaternario (Tricart 1967). Estas quebradas canalizan las aguas lluvias invernales que alimentan cauces mayores como el estero Careo. Por el lado este del camino, que en dirección norte-sur comunica el sector de Copiulemu con El Roble, se ubica una de las quebradas más profundas y por donde drena el río Cayurranquil, el cual al sur de Curanipe desemboca en el Océano Pacífico con el nombre de Río Chovellén (Carta Terrestre IGM 1986). El sustrato geológico es material metamórfico enriquecido de esquistos cristalinos (García 1968) sobre el cual se han desarrollado suelos transicionales pardo no cálcicos a lateritas pardos rojizos. Este sustrato sin cubierta vegetacional es sensible a la erosión pluvial, además de su ligero drenaje y baja fertilidad (Roberts y Díaz 1959- 1960). El macroclima es subhúmedo con una media térmica anual de 12,3 ºC y oscilaciones de 9 a 16 grados. Las precipitaciones se concentran en el período invernal en cantidades de 829 a 1.000 mm (Di Castri y Hajek 1976, Quintanilla 1974, Amigo y Ramírez 1998). La vegetación del sector tiene dos orígenes diferentes: uno nativo y otro introducido. La vegetación nativa se organiza en dos unidades, una de carácter azonal y otra zonal (Walter 1970) fisionómicamente delimitables y espacialmente segregadas a causa de la heterogeneidad espacial del sitio. La vegetación azonal es siempreverde, con dos expresiones para diferentes sitios: uno en laderas con descenso hacia las profundidades de las quebradas y donde dominan elementos del bosque valdiviano como Aextoxicon punctatum, Gevuina avellana, Lapageria rosea, etc., y otro ribereño a cursos de aguas o en suelos húmedos con especies higrófilas como Drimys winteri, Myrceugenia exsucca, Luma chequen, etc. (San Martín et al. 1988). La vegetación zonal es de tipo caducifolio en suelos secos y altitudes mayores, con dominio de Nothofagus glauca, “Hualo”, y participación de elementos del bosque esclerófilo de Chile Central como Cryptocarya alba, Escallonia pulverulenta, Kageneckia oblonga, etc. (Donoso 1975). Los rodales de Raulí ocupan colinas a 525 ms.n.m., en promedio, en exposiciones S, SO y O y marginal al del tipo “Hualo”, siendo, por apreciación visual, delimitables en el período vegetativo favorable. A causa de la orientación reciben la húmeda carga de masas de aire del Oceáno Pacífico que en invierno influye en el desarrollo de epífitos no vasculares observados en la parte superior de los árboles como los macrolíquenes Lecanora strobilina y Usnea sp. (Pereira et al. 1999). La vegetación introducida corresponde a plantaciones de Pinus radiata. El sistema de uso del suelo para esta especie ha sido determinante en la transformación del paisaje del sector con impacto en la vegetación nativa cuya configuración actual es discontinuada. En las plantaciones es posible observar regeneración vegetativa de especies leñosas autóctonas, entre ellas Gomortega keule, N. glauca, N. obliqua e incluso N. Alpina, como también, en los primeros cinco años de crecimiento, una cobertura herbácea. Una segunda especie exótica y arbustiva es Teline monspessulana, “Lluvia de oro”, Papilionaceae, que fuera del control humano, en densas poblaciones, coloniza sitios intervenidos pudiendo incluso penetrar por los caminos de acceso al interior del bosque nativo. La dispersión y regeneración por semillas de esta especie ha sido determinante en su carácter invasivo, cuyos matorrales puros representan un potencial peligro para la regeneración natural de las especies nativas (San Martín y Donoso 1995). Previo recorrido por el predio El Mirador 3 y en dos excursiones realizadas en el período estival, se seleccionaron rodales de N. alpina de acuerdo con su homogeneidad florística, fisionómica y topográfica (Knapp 1984). Luego, en cada rodal y con aplicación de la metodología fitosociológica del sur de Europa (Braun-Blanquet 1979) para superficies de 100 m2 (10 x 10 m) se levantaron 12 censos florísticos, registrándose la presencia y cobertura porcentual de las especies vegetales vasculares, descartando los ejemplares muertos. Con los datos se confeccionó una tabla vegetacional donde se evaluó la biodiversidad florística considerando los siguientes índices de cuantificación (Wolda 1981, Pfadenhauer 1993): a. la riqueza de especies o número total de especies presentes en los rodales (S). b. índice de Shannon Wiener (H) con los valores de cobertura y aplicación de la fórmula: H = – pi ln pi donde pi = porcentaje de cobertura de una especie / porcentaje de cobertura de todas las especies. c. índice de Equitatividad (J) según la fórmula J = H / lnS Para cada especie se determinó el origen geográfico, su frecuencia y el valor de importancia (Wikum y Shanholtzer 1978). Con la información ordenada se determinaron las clases de frecuencia, el índice de homogeneidad de la tabla vegetacional (Tüxen 1977) y el índice de afinidad de las especies respecto a N. alpina (Ellenberg 1956), así como el coeficiente de comunidad de Sorensen (Mueller-Dombois y Ellenberg 1974). Con apoyo de la literatura se analizó el espectro ecológico y biogeográfico de las especies (Gajardo 1983, Ramírez y Figueroa 1985, Veblen et al. 1996, Villagrán et al. 1977). La nomenclatura de las especies sigue a Marticorena y Quezada (1985). RESULTADOS Y DISCUSIONBiodiversidad florística: para una superficie de 1.200 m2, es decir, 12 censos, los rodales de N. alpina incluyen una riqueza florística de 82 especies (anexo 1) con desigual distribución de las cantidades entre ellos. El valor medio por censo es de 24,1 con un máximo de 32 y un mínimo de 14 especies. La variabilidad de los valores absolutos refleja una heterogeneidad en la distribución espacial de las especies, explicable por la diferencia de magnitud de la superficie de los rodales, el grado de cobertura de Raulí y la diversidad en las características de los sitios. La mayor cantidad de especies se encontró en aquellas unidades con menor cobertura de Raulí, pero que disminuyen cuando ésta es uniformemente dominante. Como se observara en algunos rodales, el aumento y uniformidad de la cobertura está determinada por el desarrollo y densidad de individuos de N. alpina, con lo cual aumenta la sombra y, en consecuencia, el efecto es una disminución en el número de especies. La segregación espacial de las especies tiene su origen en la heterogeneidad de los sitios. Así en hábitats húmedos acompañan a N. alpina, entre otras especies, Gomortega keule, Jovellana punctata, Pernettya insana, Greigia sphacelata. Por el contrario, en hábitats más secos y cálidos estas especies son remplazadas por Ugni molinae, Ribes punctatum, N. glauca, Cryptocarya alba y otras. En el espectro taxonómico participan los grupos de Pteridophyta, Gymnospermae y Angiospermae con Dicotyledonae y Monocotyledonae. La mayor representación en familias, géneros y especies corresponde a estas dos últimas clases (cuadro 1).
Espectro taxonómico de los
rodales del bosque de Nothogafus alpina.
El índice de biodiversidad H alcanza valores de 2,62. Respecto a la superficie muestreada, esta magnitud representa una alta biodiversidad florística confirmando la cantidad de especies anteriormente señalada y, en consecuencia, existe una baja probabilidad de encontrar por azar una especie en particular. Junto con ello el índice de equitatividad (J) de 59,40 predice una tendencia a una desestructuración de los rodales a causa de una distribución de la cobertura-abundancia entre las especies. Este resultado junto con la composición florística describen una posición marginal de los rodales en la Cordillera de la Costa de Chile Central con respecto a los típicos bosques de Raulí descritos por Pollmann (2001) para el Parque Nacional Tolhuaca y la Reserva Nacional Malleco de la IX Región. Las especies vasculares encontradas aquí corresponden, principalmente, a las presentes en el Bosque Maulino, formación con la cual tendría una mayor afinidad florística respecto a los rodales del sur del país. Sin embargo, acompañan aquí también a N. alpina elementos característicos de los rodales de esta última zona como Dasyphyllum diacanthoides, Aextoxicon punctatum, Laurelia sempervirens y Embothrium coccineum. El encuentro de especies del sur con otras de la zona central incide en el carácter transicional de la estructura de lo rodales de N. alpina. El histograma de frecuencias confirma el resultado anterior puesto que los más altos valores se concentran en las escalas A (0-20%) y B (21-40%) que incluyen un gran número de especies, pero con baja frecuencia. La clase E (80-100%) para un pequeño grupo, pero con alta frecuencia es ligeramente inferior a D (60-80%), demostrando así una comunidad poco definida (figura 2). Este resultado tiene validez en cuanto refleja una situación actual postintervención del bosque original de Raulí en el sector. A ello se agrega el efecto de la transformación del paisaje a causa del reemplazo en los últimos 30 años de la vegetación nativa por plantaciones forestales con Pinus radiata. Con ello se ha alterado el hábitat para las especies originales y se ha facilitado la introducción de otras exóticas ajenas a la estructura de los fragmentos.
El análisis de la tabla vegetacional confirma el grado de alteración y carácter secundario de los fragmentos de N. alpina. El cuerpo de la tabla es ocupado sólo en un 29,4%, quedando un alto porcentaje libre (71,6%). Ello demuestra que la composición florística de los fragmentos se define con muy pocas especies de alta frecuencia y, contrariamente, un alto número participa en carácter secundario. Del gráfico (figura 3) se desprende que para el área de estudio hasta seis censos son suficientes para captar la estructura de los remanentes de bosques de Raulí.
Formas de crecimiento y cobertura: Los rodales presentan los estratos verticales clásicos para un bosque con árboles, arbustos e hierbas, los cuales se relacionan entre sí por trepadoras. Los diferentes grupos difieren tanto en la cantidad como en la cobertura de las especies (anexo 2). En el estrato arbóreo se concentra una mayor diversidad de elementos florísticos con una cobertura del 82% (cuadro 3), reflejando una organización conservativa de bosque, respecto a las otras formas de crecimiento. Las especies de mayor cobertura corresponden a Nothofagus alpina seguido de N. glauca, N. obliqua, Gevuina avellana, Cryptocarya alba, Lithrea caustica, Aextoxicon punctatum y Laurelia sempervirens (anexo 2). En los arbustos representados por 15 especies, sobresalen en cobertura Jovellana punctata, Ribes punctatum y Viola portalesia. En el estrato herbáceo participan 25 especies, pero con baja cobertura, destacándose Blechnum hastatum, Adiantum chilense y Libertia sessiliflora. Finalmente las trepadoras presentan 17 especies de reducida cobertura-abundancia, en que se destacan Lapageria rosea, Bomarea salsilla y Herreria stellata (anexo 2). La cantidad de especies herbáceas y trepadoras revela ausencia de cobertura arbórea cerrada en algunos rodales, confirmándose el carácter degradado de la vegetación. Una observación interesante en la estructura de los rodales es la escasa abundancia de individuos de Pinus radiata y Teline monspessulana, especies exóticas que determinan el entorno vegetacional con una potencial amenaza para la vegetación nativa del lugar. La escasa presencia de estas especies se explica porque P. radiata es una plantación joven que aún no ha alcanzado la fase reproductiva. T. monspessulana todavía no es un elemento invasor en los rodales estudiados. La regulación en el avance de “Lluvia de oro” se explicaría por el aislamiento del sitio a causa de franjas de vegetación nativa residual del Bosque Maulino y elementos esclerófilos, propios de la depresión intermedia de la zona mediterránea de Chile Central. Frecuencia, valor de importancia y coeficiente de afinidad: las especies con los valores de frecuencia superiores al 50% alcanzan a 19, encontrándose junto a N. alpina con un 100% (Amigo et al. 2000) (anexo 2). Con valores inferiores siguen un grupo de 16 especies (cuadro 3). Esto significa que una fracción de un 78% (63) del conjunto florístico restante tiene probabilidad de hallazgo inferior al 50% y sólo un grupo de 18 de ellas los supera (cuadro 2).
Lista de las especies con
los valores de frecuencia superior al 50%.
Los valores de importancia son de pequeña magnitud. Como especies más características de los fragmentos en cobertura y frecuencia se encuentran junto a N. alpina otros árboles como N. glauca (14,7), Gevuina avellana (12,4), Cryptocarya alba (7,8) y Nothofagus obliqua junto a Aextoxicon punctatum (7,1). Finalmente están Aristotelia chilensis y el arbusto Jovellana punctata con 5,1 cada una. El análisis del grado de asociación de las especies con N. alpina demuestra que los valores superiores a un 40% incluyen sólo un 18,3% del conjunto florístico, es decir, l5 especies. En primer lugar se encuentran Aristotelia chilensis (100%), luego entre 60-80% Gevuina avellana y las hierbas Adiantum chilense y Blechnum hastatum. El resto de las especies con valores entre 40 y 60% están Aextoxicon punctatum, Persea lingue, N. glauca, Cryptocarya alba. En los arbustos Ribes punctatum, Viola portalesia y Jovellana punctata. Entre las hierbas, Libertia sessiliflora y en las trepadoras Lapageria rosea, Bomarea salsilla y Herreria stellata. Los resultados confirman que las especies características para los rodales de Raulí son el Hualo y un reducido grupo de otras especies del bosque esclerófilo de Chile Central y Valdiviano del sur del país. Indice de comunidad: el índice de comunidad Sorensen se basó en una matriz de 132 parejas de censos florísticos (12 x 11), encontrándose valores que oscilan entre 85,1 y 18,8%. De ellos sólo 19 pares, es decir, un 23% del total, superan una afinidad del 50%. Esta baja afinidad entre los censos confirma una heterogeneidad en la estructura y composición de los rodales. En las similitudes más altas ha contribuido la cercanía de las parcelas y en las más bajas la lejanía y cobertura dominante de N. alpina, que incide directamente en aumentar una pobreza en las especies asociadas. Aunque Raulí es la especie con los más altos valores de importancia y frecuencia en los rodales, un alto porcentaje de los pares de parcelas (77%) muestra similitudes inferiores al 50%, confirmando el carácter marginal y desuniformidad en la distribución espacial de las especies así como una cobertura irregular de N. alpina. Grupos ecológicos, biogeográficos e importancia de las especies: en un análisis del espectro ecológico las especies de los rodales se segregan en tres grupos: esclerófilas, mésicas e higrófilas (cuadro 3). Las primeras pertenecen a los bosques esclerófilos de Chile Central, las segundas son propias de los bosques maulinos y las terceras, son integrantes del Bosque Valdiviano, de más al sur. En el grupo de los elementos esclerófilos se encontraron 17 especies características del bosque siempreverde de la zona mediterránea de Chile, las cuales muestran alta presencia en las formaciones de Nothofagus de la zona central como son los árboles Cryptocarya alba, Lithrea caustica, Proustia pyrifolia, Azara integrifolia, Escallonia pulverulenta, Peumus boldus, Citronella mucronata y en las hierbas, Adiantum scabrum y Solenomelus pedunculatus. Entre los elementos propios del Bosque Maulino además de N. glauca se encuentran los arbustos Ribes punctatum, Viola portalesia como trepadora Bomarea salsilla y Relbunium hypocarpium; en las hierbas, Libertia sessiliflora y Nassella chilensis. Como representantes del Bosque Valdiviano se encuentran Laurelia sempervirens, Aextoxicon punctatum, Gevuina avellana, Lomatia dentata y L. hirsuta; en los arbustos, Ugni molinae y Pernettya insana y en las trepadoras Lapageria rosea, Ercilla syncarpellata. Finalmente como elementos higrófilos están Greigia sphacelata, Escallonia revoluta y E. rubra (anexo 1). Como elementos propios de la Cordillera de la Costa de la zona central participan un grupo de especies que contribuye a la singularidad y vulnerabilidad de los rodales como son Herreria stellata, Gomortega keule, Sphacele chamaedryoides, Jovellana punctata. Entre las especies con problemas de conservación están incluidas en los fragmentos con amenaza de extinción Gomortega keule, vulnerable Nothofagus glauca y rara Citronella mucronata. CONCLUSIONESLos rodales de N. alpina para el extremo norte de su distribución costera latitudinal contienen una alta riqueza florística a causa del efecto postimpacto antrópico y a su posición marginal en la zona de contacto en el margen de distribución sur del Bosque Maulino. La diversidad de especies demuestra un carácter conservativo, tanto por la disposición de las especies para dar forma y a la vez mantener una organización de bosque, como por el alto número de elementos nativos, otros endémicos, relictos o con área de distribución restringida. Entre ellas y por los problemas de conservación se destacan Nothofagus glauca, Gomortega keule y Citronella mucronata. Con distribución sólo en la Cordillera Costera se encuentran G. keule, Pernettya insana, Herreria stellata y Sphacele chamaedryoides. La composición florística y textura de las especies demuestran una estructura mixta de los rodales. El encuentro de elementos esclerófilos de Chile Central con otros de los Bosques Maulino y Valdiviano determinan un dominio de especies siempreverdes por sobre las caducifolias. Tal situación es un factor característico de zonas transicionales. AGRADECIMIENTOSEl autor agradece el apoyo del Instituto de Biología Vegetal y Biotecnología de la Universidad de Talca, así como a los diferentes árbitros que con su experiencia contribuyeron al enriquecimiento del trabajo. BIBLIOGRAFIAAMIGO, J., y C. RAMIREZ. 1998. “A bioclimatic classification of Chile woodland communities in the temperate zone”, Plant ecology 136: 9-26. AMIGO, J., J. SAN MARTIN y L. GARCIA 2000. “Estudio fitosociológico de los bosques de Nothofagus glauca (Phil.) Krasser del Centro-Sur de Chile”. Phytocoenología 32(2): 193-221. BRAUN-BLANQUET, J. 1979. Fitosociología: bases para el estudio de las comunidades vegetales. H. Blume Edic., Madrid, 820 p. DI CASTRI, F. y E. HAJEK. 1976. Bioclimatología de Chile. Vicerrectoría Académica Universidad Católica de Chile, Santiago, 128 p. DONOSO, C. 1975. Distribución ecológica de las especies de Nothofagus en la zona mesomórfica. Fac. de Ciencias Forestales, U. de Chile, Santiago, Bol. Téc. 33: 1-21. DONOSO, C. 1978. 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Lista de las especies vegetales
vasculares en los rodales de “Raulí”, Nothofagus alpina, Fagaceae en la
Cordillera de la Costa de Chile Central. NC = Nombre común; O = origen
fitogeográfico; FdeC = Forma de crecimiento: A = Arbol; a = arbusto; H
= Hierba; T = Trepadora: VI = Valor de importancia: FV = Formación vegetacional;
BE = Bosque Esclerófilo; BM = Bosque Maulino; BV= Bosque Valdiviano CE
= Carácter ecológico; E = Esclerófilo; M = Mésico; Hi = Higrófilo.
Frecuencia de las especies
en los grupos de censos florísticos con valores ordenados de mayor a menor:
El cuerpo de la tabla contiene los valores porcentuales de cobertura.
Recibido: 29.07.2002
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