Revista de Derecho, Vol. V, diciembre 1994, pp. 36-38 SEMINARIO INTERNACIONAL SOBRE REGIONALIZACION
DISCURSO INAUGURAL
Karín Exss Krugmann *
En representación de la Facultad de Derecho de la Universidad Austral de Chile me es grato inaugurar este Seminario, dar la bienvenida a los profesores participantes en él y expresar la esperanza que sus exposiciones y debates contribuyan a clarificar el objetivo de la regionalización en Chile y a articular las reformas que él requiere, a la luz de la experiencia ya acumulada en nuestra patria, en España y en Francia. La regionalización es el proceso de cambios más complejo y de mayor envergadura desarrollado en Chile en los últimos veinte años. Sus resultados, sin embargo, no son evaluados positivamente de manera uniforme. Esta apreciación crítica, que no es sinónimo de una actitud negativa ni pesimista, se observa con especial energía y claridad en las regiones. No puede extrañar tal situación, pues en nuestras divisiones geográficas es donde más se sienten -y sufren- las consecuencias negativas del centralismo de la capital. Pero la regionalización no es un proceso único ni principalmente dirigido a neutralizar y revertir las nocivas consecuencias que, para el desarrollo armónico de la República, tiene Santiago como ciudad-Estado, con el 45% de la población nacional viviendo en ella y consumiendo un porcentaje semejante de todos los recursos, públicos, privados, generados por los chilenos. Efectivamente, nos asiste la convicción que la regionalización es un proceso, cuya legitimidad, incluso más, cuya necesidad y justificación apremiantes son afirmativas de valores políticos, sociales, económicos y, en general, culturales que se relacionan con la modernización de Chile, el bien común de sus habitantes y el crecimiento equilibrado de sus áreas territoriales. Trátase así de superar los inconvenientes que generan las denominadas fronteras interiores, o sea, los espacios infrautilizados, desconectados del resto del país, subhabitados y, en cuales, lamentablemente, no se hace sentir nuestra soberanía ni gravita la cultura nacional. Así enfocado el tema cuyo análisis es el objetivo de este Seminario, se descubre y comprende la trascendencia que, para el despliegue de las ricas potencialidades de Chile, como país con regiones integradas, tiene la realización, sostenida y constante, de un proceso de descentralización plena y exitosa. Y se entiende también por qué son las regiones, y los que en ellas han asumido la materialización de tal proceso, quienes tienen que situarse en la vanguardia de la reflexión y, después, de la acción para concretar los ideales de libertad y participación democrática, de solidaridad, de gestión eficiente de los servicios públicos para la satisfacción de las necesidades colectivas y otros que hoy caracterizan al denominado Desarrollo Humano o Consecución de una mejor Calidad de Vida. Chile tiene ya una preocupación más que centenaria por estos problemas y existe conciencia de la urgencia de solucionarlos. Nuestra experiencia, por lo tanto, es valiosa y debe ser aprovechada al momento de apreciar lo hecho y proyectar la reformas que ya resultan irrebatibles. Pero, además, en otros Estados Unitarios, la regionalización ha avanzado más que entre nosotros, siendo los suyos ejemplos que debemos analizar con ánimo no de mera imitación, sino de rigurosa adaptación de valiosas experiencias. En ese sentido, es mucho lo que debemos examinar de los modelos español y francés, probablemente los dos más evolucionados, en su tipo, entre los estados democráticos de nuestro tiempo. La Facultad de Derecho de la Universidad Austral de Chile expresa, por intermedio mío, su reconocimiento y gratitud al distinguido catedrático español Francisco Fernández Segado. Manifiesta con cálidas palabras su aprecio a la destacada profesora francesa Catherine Meyson-Renoux. Ambos académicos de las más prestigiadas universidades de Europa, nos honran con su participación en este Seminario. Extiendo nuestro testimonio de reconocimiento y aprecio al profesor de esta Facultad, don José Luis Cea Egaña, quien evaluará el curso de la descentralización en Chile. Estamos seguros que las ideas novedosas que ellos expondrán, sus apreciaciones sólidamente fundadas de la regionalización en España, Francia y Chile, así como sus proposiciones concretas de reformas, resultarán de alta utilidad para quienes, como la decana que les habla y, estoy segura, todos los asistentes a este Seminario, reconocen que son partes de un compromiso, dirigido a la realización exitosa de ese proceso, porque es esencial para la consolidación y desenvolvimiento de la libertad, con justicia y bienestar, en pueblos que integramos una misma civilización humanista y democrática.
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