Respuestas iniciales de indicadores de salud de suelo a enmiendas orgánicas y establecimiento de vegetación en un bosque esclerófilo incendiado
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Resumen
El cambio climático y un manejo inadecuado del paisaje han aumentado la intensidad y severidad de los incendios forestales en ecosistemas Mediterráneos chilenos, incluyendo los bosques de tipo esclerófilo. Durante el verano 2016–2017, un mega-incendio afectó más de 5.000 km2 en el país, comprometiendo estos ecosistemas. A pesar de los avances en la recuperación de la vegetación después de los incendios, la recuperación del suelo ha sido menos explorada en estos bosques. Este estudio evaluó la respuesta temprana de indicadores simples y accesibles de salud del suelo a diferentes enmiendas orgánicas y establecimiento de vegetación. Seis meses después de la aplicación de la enmienda orgánica (compost, estiércol de cerdo o de aves de corral) y del establecimiento de la vegetación (semillas o plántulas), los indicadores de salud del suelo, incluyendo recuentos microbianos heterotróficos (unidades formadoras de colonias -UFCs) y características fisicoquímicas se determinaron en un bosque Mediterráneo esclerófilo incendiado del centro de Chile. Las enmiendas orgánicas, el establecimiento de la vegetación, y su interacción afectaron significativamente las UFCs del suelo, mientras que el pH y la conductividad eléctrica se vieron afectados solamente por la enmienda orgánica. El tratamiento de estiércol porcino- plántulas, y el bosque de referencia sin quemar tuvieron cuatro y cinco veces más UFCs que el control, respectivamente. No se observó ningún efecto en el contenido gravimétrico de agua, en el contenido de materia orgánica, o en la distribución de agregados. En general, se registraron efectos menos marcados en las condiciones fisicoquímicas del suelo en comparación con los recuentos microbianos.