Monitoreo de la superficie de los bosques nativos de Chile: un desafío pendiente
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Resumen
El monitoreo de los bosques es fundamental para la toma de decisiones de manejo y conservación. En Chile, el sistema de monitoreo de bosques se inició en el año 1994, y se ha mantenido mediante la realización de actualizaciones regionales. Esto ha permitido hacer un seguimiento temporal de la superficie, distribución y características del bosque nativo. Sin embargo, mientras las actualizaciones regionales han reportado un continuo aumento del bosque nativo a nivel nacional, otras fuentes han mostrado una tendencia contraria. A raíz de esto, se evaluó la capacidad del sistema de monitoreo forestal para realizar un seguimiento temporal de la superficie de bosques. Específicamente se realizó una revisión de los informes y datos oficiales a través de tres criterios básicos que deben poseer los sistemas de monitoreo forestal: i) comparabilidad, ii) replicabilidad y iii) calidad. De acuerdo con los resultados obtenidos, el sistema de monitoreo de bosques chileno no cumple con estos requisitos mínimos ya que: i) las metodologías no son consistentes en el tiempo, ii) no proporciona una línea base de coberturas del suelo ni de deforestación que permita hacer comparaciones con las tasas de cambio futuras, iii) no existe una estimación adecuada de la incertidumbre de los resultados, ni como ésta puede afectar al monitoreo. El sistema de monitoreo nacional forestal requiere una redefinición de sus objetivos, alcances y métodos, de manera de ofrecer información clara de un recurso clave en la conservación de la biodiversidad y estrategias de mitigación y adaptación al cambio climático.