La carne bovina como parte de una dieta saludable. Una revisión
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Resumen
Por décadas el consumo de carnes rojas ha sido tema de debate a nivel global. Primero por su efecto sobre la salud y más recientemente por temas éticos y ambientales. Sin embargo, la carne ha sido parte de nuestra dieta por más de 3 millones de años, y es considerada como crítica en la evolución del hombre y en el desarrollo de sus habilidades cognitivas. Las presiones por reducir su consumo desde fines de los 70s también se ha basado en estudios de epidemiológicos, los que establecen asociaciones pero no causalidad. Sin embargo, diversos estudios aleatorizados controlados no han logrado establecer causalidad entre su consumo y enfermedades cardiovasculares y/o cáncer, ni tampoco de estas con el consumo de ácidos grasos saturados. Esto genera dudas razonables sobre la efectividad de las actuales recomendaciones nutricionales y su potencial impacto en la salud. En este trabajo presentamos evidencia reciente sobre el efecto del consumo de grasas saturadas y carne bovina en la salud, como un nuevo paradigma. Este alimento de bajo contenido calórico y alta densidad de nutrientes, a su vez de alta biodisponibilidad, también aporta importantes metabolitos funcionales para la salud humana, pudiendo ser perfectamente parte de una dieta saludable y amigable con el ambiente.